ASOCIACION BIBLICA SAN PABLO

ASOCIACION BIBLICA SAN PABLO

sábado, 5 de marzo de 2016

MUJERES DE LA BIBLIA: REBECA

MUJERES DE LA BIBLIA 2: REBECA






            Para la historia sagrada Rebeca es ante todo la esposa de Isaac y la madre de Esaú y Jacob.
            Los datos de su vida pueden agruparse en tres acontecimientos principales: matrimonio con Isaac, nacimiento de sus hijos Esaú y Jacob y la astucia de su madre para obtener la bendición paterna sobre Jacob suplantando a Esaú.
            Abraham muy entrado en años se preocupa del matrimonio de su hijo Isaac. Para ello encarga a su mayordomo Eliecer, muy prudente y lleno de experiencia a que se traslade a Mesopotamia a buscar entre sus parientes, ya que las jóvenes de Canaán son paganas y politeístas.
            El criado, consciente de su responsabilidad, pide a Dios que le ayude y le pide una señal: “Yahvé, Dios de mi señor Abraham, dame suerte y favorece a mi señor Abraham. Voy a quedarme junto a la fuente adonde acuden las muchachas de la ciudad para tomar agua. Que la muchacha a quien yo diga: “Inclina tu cántaro para que yo beba”, y ella me responda; “Bebe y también abrevaré a tus camellos” sea la que tienes destinada para tu siervo Isaac (Gen 24, 12-14).
            La señal no parece mal elegida. El criado piensa que dar de beber a un extraño es ya una prueba de buen corazón. Pero sacar agua de un pozo para saciar la sed de una caravana de diez camellos no es un favor que hace cualquiera. Solo puede hacerlo una persona muy delicada y caritativa, dispuesta a servir y ésta sería una buena adquisición para el hijo de su señor.
            Eliezer observa atentamente a una joven que viene a sacar agua del pozo: la joven es muy hermosa. Y virgen, que no había conocido varón (Gen 24, 16). Baja a la fuente, llena su cántaro y sube. El criado corre a su encuentro y le dice: “Dame un poco de agua de tu cántaro”. Ella le dice: “Bebe, señor, y sacaré agua también para tus camellos hasta que se hayan saciado.”
            Cuando los camellos se hartan de agua le pregunta a la joven por su nombre. Se llama Rebeca y es hija de Betuel. El criado no sale de su asombro: ha encontrado a la sobrina nieta de su señor. Da gracias a Dios porque le ha conducido a la casa de los parientes de su amo. Dice el objeto de su viaje y es aceptado.
            Se ponen en marcha y cuando llegan a su casa Isaac introduce a Rebeca en su tienda y se casa con ella. Después de 20 años de matrimonio, por fin nacen dos gemelos: Esaú y Jacob.
            Se van haciendo mayores; a Esaú le gusta la caza y preparar guisos para su padre; Jacob prefiere pasar el tiempo con su madre y cuidar del rebaño.
            Un día Esaú llega a casa muy hambriento y le pide a su hermano que le dé unas lentejas que había preparado. Jacob se las dio a cambio de adquirir la primogenitura, cosa que su hermano no consentirá. Cuando llegó el momento de que el padre bendiga al mayor, Rebeca que tiene predilección por Jacob planea una estratagema para que su marido, casi ciego, bendiga a Jacob.
            La desesperación de Esaú al verse privado de la bendición de su padre es tan enorme que toma la decisión de matar a su hermano. Se entera Rebeca y convence a Jacob para que se vaya a Mesopotamia, a casa de su tío Labán. Sin duda fue muy duro para ella el dejar marchar a su hijo de noche y en secreto. Aquí acaba la historia de Rebeca. Nada sabemos de su vida posterior.

Por Francisco Pellicer Valero

No hay comentarios:

Publicar un comentario